Hacia un horizonte híbrido y multi-Cloud

El Cloud Computing surge en la década de los 50 y desde entonces no ha dejado de revolucionar la forma en que almacenamos, compartimos y accedemos a los datos. Su evolución ha sido asombrosa y ha significado toda una revolución tecnológica e industrial. Las empresas, en su proceso de digitalización, necesitan ejecutar sus aplicaciones y administrar de forma ágil sus datos en entornos híbridos, múltiples ubicaciones y en el Edge.

Cloud se ha convertido en una herramienta imprescindible a nivel empresarial y personal; una tecnología que ha mejorado la decodificación de nuestros datos y ha buscado proteger nuestra información. A pesar de que lleva más de tres décadas con nosotros, el traslado y la escalada de las operaciones de las empresas a los entornos digitales Cloud continúan siendo parte fundamental de los procesos de transformación digital de los negocios actuales. “Una tendencia que se extiende a lo largo de todo el globo, mostrando los informes de Check Point Research su mayor incremento en Asia, con una digitalización de más del 60%; seguida de cerca por Europa, que aumentó sus entornos cloud en más del 50% en 2022 con respecto al año anterior”, señala Eusebio Nieva, director técnico de Check Point Software para España y Portugal.

España se está convirtiendo en uno de los principales epicentros europeos de las nuevas regiones Cloud. Así pues, “no sólo destaca la entrada de hiperescalares como Amazon o Microsoft, sino también una gran cantidad de pequeños proveedores cloud de todo tipo. Un impulso que viene dado gracias a su buena ubicación geográfica (siendo un importante nexo entre Europa y el norte de África), junto con una oferta de precios de infraestructuras competitivo y una gran capacidad para la centralización de datos.

«Es evidente que el ecosistema de regiones Cloud creado en España continuará expandiéndose, marcando con ello la llegada de nuevas oportunidades y retos, y la necesidad de una ciberseguridad efectiva y consistente para estas infraestructuras”, advierte Nieva.

Esta decisión de los grandes ‘hyperscalers’ de invertir en la creación de estas Regiones Cloud sitúa a España como uno de los epicentros europeos en este ámbito por su ubicación geográfica favorable y la disponibilidad de infraestructuras. Como explica Miguel López, Architecture & Infrastructure Engineering Director de Making Science, es probable que la dinámica de apertura de nuevas regiones Cloud en España continúe en los próximos años. Esto se debe a varios factores, entre los que se incluye el crecimiento a ritmo acelerado del mercado de la nube en España, y se espera que siga creciendo en los próximos años. Según un estudio de IDC España, el mercado de la nube en España podría alcanzar los 5.143 millones de euros en 2025, lo que representa un crecimiento anual del 21,9%. Además, la mejora de la infraestructura de telecomunicaciones en España está haciendo que el país sea más atractivo para las empresas de servicios Cloud.

“Hay varias empresas de servicios Cloud de menor tamaño que están creciendo rápidamente, y es posible que estas empresas decidan expandirse a España. Esto se debe a la necesidad de servicios cloud especializados que pueden ser cubiertos por nuevos actores como Alibaba Cloud, Tencent Cloud, Huawei Cloud, entre otros que ofrecen servicios de tipo IaaS y SaaS”, indica Miguel López.

En esta misma línea, Luis Casero, Portfolio Marketing Manager de Vertiv, apunta que “la competencia en la nube es alta y empresas más pequeñas y regionales a menudo buscan entrar en mercados locales para ofrecer servicios específicos”, más allá de los hiperescalares.

Así, “los proveedores locales de Cloud tendremos cada vez un papel más relevante en el mercado como actores dentro de las estrategias multi Cloud o Cloud híbrida gracias a nuestra cercanía al cliente final y la flexibilidad y capacidad de adaptación de nuestras ofertas, cumplimentada siempre con un porfolio de servicios gestionados de calidad”, opina por su parte Julio Saíz, BDM Infrastructure and Cloud Services de Alhambra IT.

Además, observa David Rodríguez Rojas, Marketing Manager Spain de 3CX, “es muy probable que esta dinámica continúe, ya que las empresas de cualquier tamaño buscan satisfacer la creciente necesidad de infraestructura y servicios en la nube. Por lo tanto, este comportamiento propagará el aumento constante de adopción de tecnologías como la VoIP y las Comunicaciones Unificadas”, que se ven favorecidos por la flexibilidad y potencia que aporta la nube.

Madurez del mercado

Día a día, las empresas se muestran cada vez más maduras en cuanto a su apuesta por la nube y avanzan de forma clara hacia un cada vez mejor aprovechamiento de ésta. “La adopción de la nube por parte de las empresas ha ido evolucionando a muy buen ritmo y, en los últimos años, las empresas han desplegado la mayoría de sus nuevos proyectos en Cloud. Eso sí, es ahora cuando las grandes compañías y los organismos públicos empiezan a migrar el core de su negocio y sus entornos de misión crítica al cloud de manera masiva, una tarea que se debe realizar con máximas garantías de eficiencia y de seguridad, para lo que necesitan el apoyo de proveedores con una gran experiencia en estos entornos”, detalla Noel Bravo, director de Servicios Cloud y Alianzas de Kyndryl.

Para Luis Casero, Vertiv, no obstante “aunque la oferta de proveedores Cloud cada vez es más sólida, aún no es un negocio maduro en España. Las grandes corporaciones y empresas tecnológicamente avanzadas están liderando la migración hacia la nube, aprovechando servicios avanzados y modelos de operación basados en esta. En cambio, muchas pequeñas y medianas empresas están en las primeras etapas de exploración o adopción limitada… Sin embargo, en general, se observa una creciente conciencia de los beneficios que ofrece el cloud en términos de agilidad, escalabilidad y eficiencia”.

En esta misma línea, Daniel Taboada, Ceo de Arbentia, expone que “aunque siempre hay diferencias en cuanto a la velocidad en el camino hacia la nube, en nuestro caso estamos observando esta apuesta generalizada en todos los sectores en los que nos especializamos con nuestras soluciones de gestión de verticales sobre la plataforma Microsoft: distribución, retail, industria, automoción… etc”. “En 2022 registramos un importante crecimiento en la demanda de migraciones a entornos híbridos, que se ha seguido manteniendo durante este 2023, y casi la totalidad de nuestros nuevos clientes están apostando por tecnologías de gestión en la nube bajo el modelo SaaS”, añade el portavoz de Arbentia, partner de Microsoft experto en tecnologías Dynamics 365.

“No creemos que el futuro sea 100% Cloud, ya que en las empresas seguirán existiendo distintos entornos para la gestión de los datos. Lo importante es que haya consistencia y que se evitan los silos de información”, añade por su lado Elena Viniegra, Cloud Lead NetApp for Eastern Europe, Middle East & Africa, and Ibero-America Region.

De igual manera, “Cloud también se ha introducido en el entorno industrial, pero creemos que en menor medida. En este tipo de entorno, el Edge Computing sigue siendo predominante debido a los requerimientos propios, como son tiempos de respuesta rápidos (latencia), limitación en ancho de banda y seguridad”, explica Iván Gimeno, responsable de Desarrollo de Negocio de Rittal.

“En estos entornos industriales el Cloud es útil para el almacenamiento y procesamiento de datos con fines analíticos, pero para el procesamiento de datos en tiempo real es absolutamente necesario soluciones de Edge Computing. Este tipo de soluciones Edge tiene que cumplir una serie de requisitos que hace que sea importante tener una serie de aspectos para su despliegue. El más importante es el propio rack o envolvente donde irán los equipos IT”, observa Gimeno. “El despliegue de infraestructura IT en entorno industrial hace necesario tener unos racks de servidores con una alta protección (idealmente IP55) y, en según qué casos, es conveniente ir a soluciones de racks totalmente securizados como los Micro Data Center Level E de Rittal”.

“Nuestra experiencia nos dice que efectivamente, en la industria el proceso de adopción del Cloud va con retraso respecto a otros sectores. Existe esa reticencia, pero que vemos que es lógica, por la mayor novedad que supone en estos entornos y, también, por las particularidades de estos entornos, donde los mismos requieren de una oferta específica que no es la tradicional de la nube”, indica por su lado Carlos Sánchez Largo, HPE Cloud Services Head for Spain: HPE GreenLake and Advisory & Professional Services.

En este sentido, desde el punto de vista de Zigor Gaubeca, CTO Grupo Aire, “Cloud no es la fórmula mágica para la solución de todos los problemas de transformación de las empresas. Existen entornos industriales de misión crítica donde la nuble pública no es una opción, pero sí soluciones intermedias como el Cloud privado, debido a la criticidad de los datos que se manejan, seguridad, misión crítica, etc. Es necesario trabajar en una arquitectura que pueda acomodar todas las necesidades empresariales”.

“Más allá de sus ventajas y atractivo, el salto a la nube necesita de la adopción de nuevas herramientas de seguridad”, advierte por su parte Eusebio Nieva, Check Point. “Este nuevo entorno expone a la empresa ante una variedad de ataques potenciales adicionales… Por esta razón, es muy probable que en los próximos años veamos un mayor debate sobre la regulación de la seguridad y su impulso, ya que el enfoque actual no parece funcionar”.

¿Cloud híbrido o multi-Cloud?

Son muchas las empresas que se han dado cuenta de que una estrategia de nube ‘única’ no puede dar respuesta válida a todos los problemas con que se encuentran en su día a día, especialmente cuando se integran múltiples servicios diferentes.

De hecho, según Gartner, el 75% de las empresas utilizarán un entorno multi-Cloud en 2025.

Como explica Miguel López desde Making Science el futuro del sector cloud tenderá hacia un entorno multi-Cloud por factores como:

  • Creciente disponibilidad de servicios cloud que ofrece mayor flexibilidad a la hora de elegir las soluciones que mejor se adaptan a las necesidades de cada empresa.
  • El cumplimiento de normativas específicas que puede requerir el uso de servicios cloud de diferentes proveedores.
  • La necesidad de reducir el riesgo y falta de disponibilidad en caso de interrupciones de servicio.

“A pesar de que los enfoques híbridos continúan siendo una opción viable, para ciertas empresas que por motivos de seguridad necesiten mantener ciertos datos o aplicaciones críticas en entornos de nube privada, consideramos que el futuro del sector Cloud será multi-Cloud”, indica Miguel López.

También para Mario Prieto Guerra, manager en Neoris, la hibridación es una realidad. “De hecho, en Neoris ya trabajamos con este tipo de estrategias en nuestros clientes debido a que los modelos híbridos aportan numerosos beneficios y suelen ser utilizadas, en algunos casos, por reticencias respecto a la seguridad, normativas, entre otras muchas”.

Por otro lado, “el modelo multi-cloud también es una realidad ya que es una de las estrategias que siguen algunos de nuestros clientes y que les permite optar por un proveedor Cloud u otro, dependiendo de los servicios que más se asemejen a sus necesidades de negocio”, comenta Mario Prieto. En este sentido, es importante destacar que “muchas empresas están adoptando estrategias Cloud Native para el desarrollo de sus aplicaciones, ya que les permiten ser agnósticos a la Cloud y es ahí donde la estrategia multi-Cloud tiene sentido porque permite a las empresas que puedan mover cargas Cloud en función de sus necesidades y evitar el vendor lock-in”, detalla.

En este mismo sentido, para Noel Bravo, Kydryl, el mercado tiende, sin duda, hacia un entorno multi Cloud, aunque las apuestas por la hibridación también son cada vez más comunes. “Cuando un cliente propone llevarse sus cargas de trabajo a la nube pública, se da cuenta en muchas ocasiones de que, aunque quiera, no puede migrar todo, por diversas razones, que van desde no tener los recursos y el conocimiento adecuado a la existencia de aplicaciones y arquitecturas que le impedía acelerar la adopción de tecnologías cloud”. Estas son, para el portavoz de Kyndryl, algunas de las razones que explican el auge de la nube híbrida que, hoy por hoy, está siendo la principal elección tecnológica de las empresas. Las empresas, además, también están apostando cada vez más por la nube distribuida e invierten en aplicaciones de nube nativa. “En relación con ello, las empresas también están acelerando la modernización de sus plataformas mainframe para integrarlos mejor en un entorno de nube híbrida”.

Y es que, como observa Pablo Gil, gerente de cuentas DataCenter-Cloud de Altia, “muy pocas empresas podrán permitirse en el futuro depender al 100% de un solo proveedor Cloud. La habilidad será gestionar de forma flexible e integrada recursos de varios proveedores de Cloud público (AWS, Azure, GCP), privados… e incluso recursos on-premise legacy. Esto permitirá reducir riesgos, costes y maximizar las capacidades disponibles para cada necesidad, ” indica Pablo Gil.

Cambio de estrategia hacia el Edge

La cifra total de gasto en Edge Computing llegará a finales de este año a 208.000 millones de dólares, un 13,1% más que 2022. Según IDC, este ritmo de crecimiento del gasto de empresas y proveedores en soluciones en este campo se mantendrá hasta 2026, fecha en la que se situará cerca de los 317.000 millones.

Como comenta Luis Casero, Vertiv, “hasta este momento, se había observado un creciente interés en el Edge Computing como una extensión de las estrategias en la nube. Pero se ha observado la multitud de ventajas que trae consigo el Edge, este implica procesar datos y ejecutar aplicaciones más cerca de donde se generan, en lugar de depender de centros de datos centralizados en la nube”. Lo que resulta especialmente relevante en casos de uso que requieren baja latencia, como aplicaciones de IoT, servicios de streaming en tiempo real y análisis de datos en el borde. “Coincidimos con que cada vez más las empresas están considerando el Edge Computing como una forma de mejorar la velocidad de respuesta, reducir la carga en las redes y abordar casos de uso específicos. Sin embargo, debemos tener en cuenta que la migración a nuevas tecnologías y estrategias lleva tiempo y recursos, por lo que será un camino largo de recorrer”, subraya Casero.

“Por descontado, a medida que la cantidad de dispositivos conectados aumenta y las aplicaciones requieren de un procesamiento más cercano al lugar donde se genera la información, el Edge se vuelve crucial”, observa David Rodríguez, 3CX. “Esto reducirá latencias, mejorando la eficiencia en donde la velocidad de respuesta es crítica, como en aplicaciones IoT, análisis en tiempo real y servicios emergentes”.

Y es que, cualquier aplicación en el sector industrial en el que sea necesario disponer de datos en tiempo real el Edge Computing es fundamental. “Hoy en día, es habitual trabajar con prototipos virtuales, ya sea a nivel de productos (por ejemplo a la hora de hacer un cuadro eléctrico) o a nivel de proceso productivo. En este último caso, es posible realizar un modelado de todo el proceso productivo de una empresa y, a través de prototipos virtuales o gemelos digitales, realizar simulaciones de posibles escenarios”, indica Iván Gimeno, Rittal. Todo esto, solo es posible si contamos en todo momento con datos a tiempo real y tiempos de respuesta muy rápidos. “Con estos prototipos virtuales podemos adaptar la producción ante cualquier incidencia de forma rápida o adaptar la producción a la demanda del mercado. En este sentido, la computación cognitiva y el aprendizaje automático son dos aspectos centrales de las aplicaciones de IA que prometen un enorme avance en el contexto de la industria 4.0. En concreto, la capacidad de aprendizaje de los algoritmos es lo que permite un alto nivel de automatización”, añade Gimeno.

A este respecto, Zigor Gaubeca comenta que “en Grupo Aire, apostamos por una arquitectura Cloud basada en arquitecturas distribuidas: hay un porcentaje centralizado y otro en el Edge. La arquitectura de sistemas depende cada vez más de las aplicaciones y de dónde se consumen los servicios. Casos de uso como la realidad virtual o la realidad aumentada requieren de la ejecución de procesos muy cerca del cliente con una baja latencia, mientras que otros procesos pueden estar en un entorno centralizado para el procesamiento de datos en diferido o con menos requerimientos de latencia”.

“No consideramos que la hibridación vaya a ser solamente entre Cloud Privada o Cloud Pública, sino que el Edge y la computación en el extremo jugarán un papel cada vez más importante”, indica asimismo Carlos Sánchez Largo, HPE.

“En este punto será decisivo la mejora de las comunicaciones en cada ubicación de las sedes de las organizaciones apoyadas por soluciones SDWAN que garanticen una conectividad de calidad y siempre disponible. Ello marcará la elección de una estrategia u otra”, apunta Julio Saíz, Alhambra IT.

Por otro lado, y aplicado al sector industrial, “Edge Computing hace que los datos producidos en los dispositivos de Internet de las cosas se procesen más cerca de donde se crearon, en lugar de enviarlos a través de largos recorridos para que lleguen a centros de datos o nubes de computación”, explica Eusebio Nieva. “Eso tiene una ventaja fundamental, ya que permite a las organizaciones analizar los datos importantes casi en tiempo real, algo que es una necesidad patente en muchas industrias como la fabricación, la salud, las telecomunicaciones o la industria financiera. Para el portavoz de Check Point Software, adicionalmente, la reducción del recorrido de los datos también acota los vectores de ataque y entrada de ciberdelincuentes y, en general, permite destinar unos esfuerzos más enfocados para garantizar la seguridad de estos datos.

Cloud e IA

La Inteligencia Artificial ha irrumpido en nuestras vidas y en el entorno empresarial de manera determinante. En el caso de la nube, como explica Elena Viniegra, NetApp, la vinculación de la Inteligencia Artificial (IA) y el Cloud Computing tiene un potencial enormemente disruptivo. “El Cloud proporciona la infraestructura escalable y la potencia de procesamiento necesaria para entrenar y ejecutar modelos de IA a gran escala, lo que democratiza el acceso a la IA para una amplia gama de empresas y aplicaciones. Esto impulsa la innovación en áreas como la automatización de procesos, la atención médica, la seguridad cibernética y la toma de decisiones empresariales”, indica Viniegra. Además, permite el procesamiento de datos en tiempo real y el aprendizaje continuo, lo que mejora la capacidad de adaptación de los sistemas de IA. “En conjunto, la IA y el Cloud Computing están transformando industrias enteras al brindar soluciones más inteligentes, eficientes y personalizadas, y se espera que continúen siendo motores clave de la innovación tecnológica en el futuro”, indica la responsable de NetApp. “No olvidemos que la IA ha evolucionado estos últimos años a lo que llamamos Inteligencia Artificial generativa, esta IA, además de procesar datos e información, es capaz de crear a su vez nuevos contenidos, como conversaciones, historias, imágenes, vídeos y música… la computación en la nube es clave para agilizar este proceso y ofrecerlo en tiempo real”, añade.

David Rodríguez, 3CX, ve cuatro potenciales principales de vincular estas dos tecnologías:

  • Procesamiento intensivo: Especialmente en la IA que a menudo requiere un poder de procesamiento alto.
  • Acceso a grandes conjuntos de datos: En donde la nube cumple con el papel de proporcionar el entorno perfecto para almacenar y acceder a gran cantidad de datos.
  • Facilitar la colaboración: Aquí nuevamente la nube entra en juego, facilitando el desarrollo y colaboración en proyectos IA.
  • Costos eficientes: Los modelos de “pago por uso” permiten a las empresas y usuarios utilizar recursos de IA pagando solo por lo que consumen.

“Desde hace tiempo, tenemos constancia de que los proveedores Cloud ya están trabajando con modelos de Inteligencia Artificial, tal vez no se haya aplicado a la IA generativa, pero sí a los modelos predictivos basados en machine learning”, expone Mario Prieto Guerra, manager en Neoris. “Por lo tanto, podemos decir que los proveedores cloud ya han incorporado nuevos servicios de IA generativa, como Azure con Open IA, basados en modelos de lenguaje natural (LLM) para proporcionar nuevos servicios cloud que terminen de evolucionar a servicios más innovadores”.

“Uno de los aspectos a tener en cuenta sobre el uso de la IA generativa dentro de los proveedores Cloud, sería el consumo que se haga de estos servicios y el posible coste que suponga el uso de los mismos, lo que quizás obligue a generar modelos más económicos ya que habrá que tener en cuenta también la aparición de los modelos IA basados en LLM especializados. Por lo tanto, se deberá buscar un equilibrio entre el uso de la IA, las necesidades de negocio y la innovación. A ello se suma también el tema normativo, la privacidad, los marcos regulatorios y la ética que habrá que tener muy en cuenta y que vendrá pautado y delimitado por el cumplimiento de una normativa europea”, detalla Mario Prieto.

Como se ha visto, “la IA empieza a estar al alcance de todos y, cada vez, estará más presente en nuestras vidas. Como cualquier tecnología, se puede utilizar para hacer el bien o hacer un uso indebido”, comenta Zigor Gaubeca, Grupo Aire.

Si hablamos de los retos a los que se enfrenta el escenario Cloud, como el de muchos otros entornos de TI, es la falta de talento y los desafíos legislativos.

“Respecto a los perfiles profesionales, como en todas las disciplinas, la escasez de personal técnico especializado es, lamentablemente una realidad. Queda mucho por hacer por parte de los gobiernos para potenciar las disciplinas STEM: en los países más desarrollados sobre el 8-9% de la población trabaja en puestos que requieren de perfiles tecnológicos, sin embargo, en España no llegamos al 3%”, expone Zigor Gaubeca. A nivel legislativo, hay un largo camino por recorrer. “Personalmente, espero que se trabaje en un marco lo suficientemente abierto para que no se detenga la evolución en las próximas décadas”, añade.

“Desde nuestra experiencia, el reto más importante al que se enfrentan las empresas españolas es la falta de expertise. La computación en la nube es una tecnología completa que requiere un alto grado de conocimientos técnicos y de negocio para desbloquear de forma eficientes todos sus beneficios. En ocasiones, es difícil encontrar profesionales cualificados con la experiencia necesaria para ayudar a las empresas a realizar su transición a la nube”, apunta Miguel López, Making Science. Para abordar este reto, “desde Making Science ofrecemos un amplio abanico de servicios de consultoría y desarrollo de aplicaciones en la nube, gracias a los equipos especializados con diversas certificaciones de los principales proveedores de nube como Google Cloud y AWS”.

“También existen retos regulatorios en aspectos como residencia de datos, uso de información personal o cumplimiento normativo”, apunta Pablo Gil desde Altia. “A nivel técnico, la complejidad de gestionar entornos cada vez más híbridos y multi-Cloud; y, por supuesto, retos económicos para que la transformación digital sea accesible a todo tipo de empresas, no solo las grandes corporaciones, ” concluye Gil.